Ya no son sólo los juguetes mimados de los hombres de negocios, sino que su uso se ha diversificado tanto que en poco tiempo cualquier persona podrá acceder a un teléfono inteligente.Estos equipos similares a una PC de mano, surgieron como un complemento ideal para el mundo empresarial. Uno de los precursores, allá por el 2000, fue Microsoft, que desarrollo un móvil con el sistema operativo Windows Smartphone con una interfaz amigable y simple de usar.
De ahí en más, el mercado comenzó a diversificarse ofreciendo terminales similares con distintas denominaciones. Entre toda la variedad de smartphones que se ofrecen hoy en día existen marcas registradas como BlackBerry o Palm Treo, que se imponen como líderes en este tipo de telefonía.
La supremacía de los BlackBerry por sobre otros equipos tiene que ver con que fue uno de los primeros en implementar y acrecentar el ancho de banda permitiendo una solución de movilidad que el usuario no tenía con otros dispositivos. Esto se fue desarrollando de tal manera que se convirtió en un sinónimo de smartphone.
“Actualmente existe una línea muy difusa entre los dispositivos que son smartphones y los que no, debido a la gran diversificación de las funcionalidades que está desarrollando la tecnología móvil”, explica Ignacio Nores, gerente de Servicios de Valor Agregado de Personal.
Singularidades
Para diferenciar estos dispositivos, a la hora de la compra es importante tener en cuenta sus funcionalidades y beneficios. Si bien cada usuario elegirá el smartphone que más se adapte a sus necesidades, se puede hablar de ciertas ventajas comunes a estos implementos. Algunas de ellas son:
* Display superior en cuanto a tamaño y calidad de imagen.
* Teclado más completo.
* Desarrollo multimedia más amplio.
* Posibilidad de crear, visualizar y editar documentos, entre otras muchas opciones.
Además permiten la sincronización con la PC y la instalación de aplicaciones adicionales que harán más sencillo cualquier tipo de tareas, en una interfaz asequible.
Es muy importante que estos equipos cuenten con gran capacidad de memoria interna y que ésta sea expandible. Asimismo también deben poseer capacidad de conectividad tanto local como a través de los sistemas utilizados en el mundo (GSM/GPRS/EDGE), para que este móvil sea también un aliado de los viajes y que faciliten la navegación por Internet y la configuración de las cuentas de correo personales y laborales.
“El smartphone se convierte en una subcomputadora”, afirma Juan Dell’Era, sales manager de Enterprise Solution. “Muchas de las tareas que antes dependían de estar sentado frente a una PC puede hacerse ahora desde este dispositivo mejorando ampliamente la productividad.”
A pesar de que ya es más generalizado el uso de estos gadgets, aún queda mucho por ver. El desarrollo de aplicaciones móviles todavía está en sus inicios. Sobre todo porque algunas empresas como Personal ya están trabajando con desarrollos personalizados para empresas y clientes puntuales, de modo tal que el smartphone se adapte a las necesidades del usuario y no que el usuario sea un mero operador.
